O les levanta el ánimo, o les mete el ritmo hasta las huesos…

Aunque como dije el otro día, la musical de la familia es… en realidad son todos bastante musicales menos yo, si puedo elegir un programa de radio sobre la transmutación yurvedica y música elijo la meditación, pero aun así, en un caso tan grave como el mío, la música me ayuda a relajarme, o como sucede por las mañanas me carga las pilas. Así que aquí van algunas de mis canciones para tener un buen comienzo de día, mis seguidores de tuiter las tendréis un poco gastadas pero son tan buenas que resisten el uso (aunque no la sobredosis 😉

Pero como este blog no está orientado a público de Disney y según las estadísticas de visitantes no tengo audiencia en las sabanas africanas o en la jungla bengalí, el efecto de la música en las fieras es un tema bien poco interesante.

Sin embargo el otro día estaba leyendo sobre los círculos viciosos o procesos de rumiar las malas situaciones, si, una de esas cosas que te pasan cuando te despiden, te sientes mal, te pones de mala leche, no te apetece ir a los eventos a los que deberías ir… pero si lees este blog desde el principio eso no te va a pasar, y si lo lees desde hace poco deberías leer «menudo lio» para evitarlo.

El caso es que, independientemente de que debes cruzar la puerta de casa, de puertas para adentro, es super importante que te «obligues» a hacer cosas que te gusten (aunque no te apetezcan demasiado) que te des permiso para disfrutar, y sabes que una de esas cosas, que además es gratis, es escuchar música que te gusta.

Bueno, si eres como yo y te gusta muerte ven de Tahures Zurdos escuchala pero alternala con otras cosas, porque si estas jodido hay que bajar a los infiernos y que mejor que hacerlo acompañado de la Belleza y la voz rasgada de Aurora Beltrán, pero no te olvides que hay camino de salida y que hay cosas sencillas que ayudan y personas que te acompañarán de nuevo #cadadiasaleelsol.