De la serie #refraneslocos hoy presentamos:
Martes ni te canses ni embarranques
Debo empezar diciendo que hoy probablemente hacía más frio que el lunes, pero ya estaba preparado, así que si alguno estaba preocupado por mi particular cambio climático, con un poco de lana se ha resuelto.
El cansancio, como ya sabéis se me nota en la escritura random, rápida pero que no sé a donde me lleva, así que para ver si me ordeno voy a contar varias cosas buenas de hoy:
- El señor del autobús del otro día (el de la cadena de valores, resulta que se llama Jesús María Pascual, en su tarjeta se presenta como historiador y hoy se ha presentado en casa, tal y como me dijo el otro día que haría, para regalarme un ejemplar de su libro «El monte Cantabria»
- Hoy además he tenido el placer de estar con una persona, que hace poco menos de un año se encontraba ante un futuro profesional incierto, y a la que puse en contacto con la empresa que le necesitaba pero que no sabía que existía. Hoy ambas partes están muy contentas de haberse conocido y a mí me han invitado a comer en «El mirador»
- He comprado cosas chulas, he comido bien, he ido y reído con mis peques que cada día lo son menos
- Se me ha escurrido un post sobre comercio local/pequeño que no mola y otro que si que mola como por ejemplo el Colletero y su tienda. Mirad que colores traía hoy la cesta de Nalda
El cansancio me puede y como ya he dicho, no soy muy de refranes, hoy martes me he cansado muuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuuucho y no sé si he embarrancado, pero por el parque de la isla me he quedado un poco encallado, si, si, en-callado, un poco mudo vamos, así que aprovechando voy a hacer mutis por el foro
Deja una respuesta